El tema del regalo que los 237 diputados de la fracción parlamentaria del PRI en la Cámara de Diputados recibieron el pasado mes de Agosto por parte de Francisco Rojas en su carácter de su "Pastor", si bien ya ha sido ampliamente comentado y criticado especialmente en Twitter en donde muchos tuiteros no sólo criticamos sino que a pesar de que tuvimos o tratamos de tener interacción directa por ese conducto con políticos priistas como la misma Beatríz Paredes Rangel y Carlos Jiménes Macías, ha sido parte de una controversia más amplia ejemplificada por un ya común dispendio de los recursos presupuestarias (léase recursos provenientes del erario público) que tanto diputados como senadores se reparten.
Cuando me enteré del contexto en que el "Pastor" Francisco Rojas declaró que había dado a sus diputados estas herramientas, haciendo énfasis en "la necesidad de que contaran con esas herramientas no sólo para que dejaran de ser analfabetas funcionales sino para interactuar más cerca con sus electores", si bien realmente me encabroné por la estupidez y cinismo inaudito del "Pastor" Rojas, al razonar que estarían más "cerca de sus electores", me dí a la tarea de investigar de donde provinieron los recursos (aunque su origen es más que obvio) habiendo encontrado lo siguiente:
En un intercambio de tuits previo a esta investigación con el Senador Carlos Jiménez Macías en el que me "aseguró" que se opondría al uso de recursos públicos para que los diputados de su partido se autoregalaran esas IPads, dado el desenlace de este asunto además de que el Senador Jiménez quedó (ya no es sorpresa) como un hablador más, luego de haber entrado al Portal de Transparencia de la Cámara de Diputados, registré mi petición de información la que a los pocos días recibí y que confirmó mi sospecha de donde obtuvieron los recursos en cuestión:
Al leer esta carta, quedó evidentemente claro no sólo que el Senador Jiménez mintió cínicamente sino que al intentar obtener una respuesta por parte de la misma Beatríz Paredes Rangel, desde el 25 de Septiembre pasado hasta la fecha, sólo he obtenido un silencio más que sospechoso:
¿El Nuevo PRI? ¿Experiencia Probada? ¿Reconstrucción SXXI? ¿Más cerca de tí? ¿Nueva Actitud? Demasiadas "buenas nuevas" que vienen de los mismos ejemplares del "Parque Jurásico Priista"... Sólo frases huecas, en otras palabras, las mismas pendejadas de siempre... "Gracias" a Beatríz Paredes Rangel por nada.
Cuando me enteré del contexto en que el "Pastor" Francisco Rojas declaró que había dado a sus diputados estas herramientas, haciendo énfasis en "la necesidad de que contaran con esas herramientas no sólo para que dejaran de ser analfabetas funcionales sino para interactuar más cerca con sus electores", si bien realmente me encabroné por la estupidez y cinismo inaudito del "Pastor" Rojas, al razonar que estarían más "cerca de sus electores", me dí a la tarea de investigar de donde provinieron los recursos (aunque su origen es más que obvio) habiendo encontrado lo siguiente:
En un intercambio de tuits previo a esta investigación con el Senador Carlos Jiménez Macías en el que me "aseguró" que se opondría al uso de recursos públicos para que los diputados de su partido se autoregalaran esas IPads, dado el desenlace de este asunto además de que el Senador Jiménez quedó (ya no es sorpresa) como un hablador más, luego de haber entrado al Portal de Transparencia de la Cámara de Diputados, registré mi petición de información la que a los pocos días recibí y que confirmó mi sospecha de donde obtuvieron los recursos en cuestión:
Al leer esta carta, quedó evidentemente claro no sólo que el Senador Jiménez mintió cínicamente sino que al intentar obtener una respuesta por parte de la misma Beatríz Paredes Rangel, desde el 25 de Septiembre pasado hasta la fecha, sólo he obtenido un silencio más que sospechoso:
¿El Nuevo PRI? ¿Experiencia Probada? ¿Reconstrucción SXXI? ¿Más cerca de tí? ¿Nueva Actitud? Demasiadas "buenas nuevas" que vienen de los mismos ejemplares del "Parque Jurásico Priista"... Sólo frases huecas, en otras palabras, las mismas pendejadas de siempre... "Gracias" a Beatríz Paredes Rangel por nada.
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